Un sistema de alarma es capaz de reducir el tiempo de ejecución de las acciones a tomar en función del problema presentado. Para su instalación es necesario entre otros equipos, una Sirena interior o exterior, la sirena exterior: es el elemento más visible desde el exterior del inmueble protegido. Tiene autonomía propia (puede funcionar aun si se le corta el suministro de corriente alterna o si se pierde la comunicación con la central procesadora) colocada dentro de un gabinete protector. Puede tener además diferentes sistemas luminosos que funcionan en conjunto con la disuasión sonora. La sirena exterior es opcional y en algunos sitios desaconsejada, en cambio la sirena interior resulta obligatoria de acuerdo con las normas europeas y americanas.